Prepara a tu hijo mayor para la llegada de un nuevo hermanito

La llegada de un nuevo hermanito a casa

Escrito por: Mabel Kremer, Periodista, presentadora de tv y eventos. Creadora de contenido de crianza y pareja. Mamá y emprendedora.

Muchos niños piden a gritos tener un hermanito, pero cuando su deseo se hace realidad, los sentimientos encontrados salen a flote. Por un lado, la dicha de tener una compañía y alguien con quien jugar, pero por el otro, surge el temor de perder el amor y la atención de sus papás, pues ya no será el único y ahora debe compartir, el tiempo, el amor y hasta sus juguetes con un nuevo hermanito.

Incluso los padres también entramos en conflicto con preguntas como ¿Seré capaz de lidiar con dos?, ¿Será que los voy a amar por igual?, ¿Qué hago si mi hijo no lo acepta?, en fin, el temor y la incertidumbre también se apodera de nosotros.

En esta transición los niños pueden retroceder un poco y presentar conductas agresivas, dificultad para dormir, hablar como bebés y regresar a los berrinches, todo para llamar la atención o como un mecanismo de defensa. Digamos que es “normal” que esto suceda, porque su hermanito es una “amenaza”, sin embargo, la forma como los padres y adultos gestionemos la llegada de ese nuevo bebé, puede evitar estas reacciones y hacer que esta nueva realidad sea una gran experiencia. 

Consejos para preparar al hermano mayor

Las reacciones de los chicos ante la llegada de un hermanito dependen mucho de la edad que tengan. No es lo mismo el comportamiento de un adolescente o de un niño con uso de razón, que la de un niño de 5 años o menos, puesto que aún está en una etapa del desarrollo donde necesita mucha atención de sus padres.

Aquí les van estos consejos: 

- Involúcralo en todo el proceso del embarazo.

Invítalo a las ecografías, permítele que participe a la hora de escoger el nombre, en la decoración del cuarto, en la compra de la ropa y todo lo que vas a necesitar para el bebé. Así sentirá que es parte de todo ese proceso y que la llegada de su hermano lo une más a sus padres, en vez de alejarlo o excluirlo.

- Pasa tiempo de calidad exclusivo. Cuando nazca el bebé, asegúrate de dedicar tiempo exclusivo a tu hijo mayor. Esto puede ser especialmente importante para mamá, quien puede necesitar ayuda de papá para encontrar estos momentos especiales.

Compartir actividades divertidas como ver una película juntos o salir al parque puede fortalecer el vínculo entre ellos.

Aunque el cuidado de un recién nacido es muy agotador y exigente, debes recargar la pila y dedicarle un tiempo de calidad al hermano mayor. Aquí el padre es fundamental, si mamá está muy ocupada con el pequeño, es el momento para que papá, entre en acción. Mientras mamá da pecho, por ejemplo, papá puede compartir una película, una salida al parque o la lectura de un cuento con el hijo mayor. Es un trabajo en equipo.

- Inclúyelo en todas las actividades del día a día con el bebé. Siempre y cuando quiera hacerlo, no de manera obligada. Permite que colabore con el baño, los teteros, los pañales y felicítalo cuando sea afectuoso con su hermano. Esto ayudara a tejer lazos entre ellos.   

- Habla con tu familia y amigos, para que cuando lleguen a casa a conocer al bebé, también presten atención al hermano mayor. Dependiendo del grado de confianza, pidan que lleven un detalle al mayor, y que los regalos no sean solo para el bebé. No se trata de darle gran regalo, pero si un detalle como un chocolate o algo que lo haga sentir importante. Es más, puedes tener en casa algo que le guste mucho, por si alguien llega con las manos vacías.

- No exageres con la carga del “hermano mayor”. Aunque ser el mayor tienen sus ventajas como enseñarle cosas a su hermanito, y saber más que el pequeño, no debes poner sobre sus hombros el peso de “eres el ejemplo a seguir”. Esto genera rivalidad desde tempranas edades y lo cohíbe de ser quien es de manera libre.

- Valida sus emociones. Si se siente un poco celoso, dile que esta bien. Pero, explícale que el amor de los padres es tan, pero tan grande e infinito, que le alcanza para muchos hijos. Para ellos es importante sentir que nuestro amor es sólido, aun con la presencia de un bebé. No olvides los abrazos y las palabras constantes de afirmación.

- Jamás lo compares con su hermanito. Ni en broma. En ninguna etapa de su desarrollo. Esto genera envidia y resentimiento entre los hermanos y baja autoestima en el que está siendo comparado por debajo del otro.

Si pones en practica estos consejos, seguro que todos disfrutarán de esta nueva etapa familiar, tendrán relaciones familiares sanas y un ambiente en casa muy acogedor.